¡La primera
escapada del año! Y es que, aunque no queda nada para el gran viaje (¡Japón!),
no pude resistirme a unos vuelos de tan bajo coste para saltar en un avión y
disfrutar de mi primer país nórdico: Copenhague. Una vez sacados los vuelos, me
di cuenta de que mi conocimiento de Copenhague llegaba hasta la estatua de la
Sirenita, por ello, me puse a investigar para traer un plan completo de todas
las cosas por saber antes de viajar, y mi diario de viaje con fotos, una vez
esté de vuelta.
